Una puerta corrediza de madera es la solución perfecta para dividir ambientes sin ocupar espacio. Además, ofrece la oportunidad de continuar disfrutando de un diseño abierto y privacidad cuando se cierra.
El estilo de la madera elegida va a aportar un aspecto más al estilo del lugar de vida. Porque al ser de madera, este elemento te va a proporcionar un toque de calidez en el ambiente.
Beneficios de usar las puertas corredizas
Una razón por la que son las más pedidas es que la madera es un material que contribuye calidez a un ámbito y se ajusta a todos los estilos de decoración de la vivienda. Al tratarse de puertas corredizas permiten cerrar espacios de más de 4 metros de ancho de una forma móvil y organizada.
La madera además ofrece seguridad, ya que las de vidrio se tienen la posibilidad de quebrar si tienen más de 0.10m de alto o bastante más de un metro de ancho. Con respecto al sonido, la madera aísla más el que el vidrio. Además, facilita barnizarlas y proporcionarles el tono que más se ajuste al diseño de la vivienda.
Una puerta corredera de madera ofrece calidez, seguridad y aislamiento a un ámbito que deseemos dividir de otro. El tipo de madera más usada es la dura, aunque la blanda es otra alternativa si el ámbito donde se instalará es seco.
Los sitios donde se colocan este estilo de cerramientos son en los sitios de bastante tránsito peatonal. Como, la cocina y comedor, salida a los patios traseros. Además, permiten un ingreso ágil hacia el otro cuarto. Porque no se requiere maniobrar un picaporte, únicamente se desliza para abrir o cerrar.
Lo que necesitas para instalar una puerta corrediza
Para que el sistema ande de forma segura se tienen que cumplir algunas condiciones. La primera de ellas es que la viga donde se instalará la guía debe ser fuerte para aguantar el peso de las puertas.
La madera de las puertas debe ser de calidad que no se doblen ni se rompan. El piso por donde se desliza debe ser nivelado, más allá de que se requiera o no una guía inferior. En este sentido, es preferible evadir la instalación de una guía en el suelo porque puede ocasionar tropezones y acumulación de mugre.
Puertas de madera
En la actualidad hay varios diseños clasificándose por el tipo de madera, el mecanismo y acabado.
Puerta empotrada
Este diseño necesita ocultar una puerta entre dos paredes, quedando totalmente oculta en el momento que está abierta. Este sistema tiene la virtud de poder aprovechar la pared para ubicar aparadores o cuadros. No obstante, su instalación no es simple, necesita de un albañil para su colocación.
Puerta con guías
En este diseño las puertas se colocan a unas guías que van atornilladas a la pared o techo. Siempre están a la vista, aunque estén cerradas o abiertas. Las paredes están detrás no se van a poder usar para decoraciones ni aparadores. Pero son más simples de disponer.